Anna Karenina

- Título Original: Anna Karenina.
- Año: 2012.
- Duración: 130 minutos.
- País: Gran Bretaña.
- Productora: Working Title Productions.
- Director: Joe Wright.
- Guión: Tom Stoppard basado en la novela de León Tolstói
- Música: Dario Marianelli.
- Fotografía: Seamus McGarvey.
- Reparto: Keira Knightley, Aaron Johnson, Jude Law, Domhnall Gleeson, Matthew Macfadyen, Kelly Mcdonald, Olivia Williams, Ruth Wilson, Emily Watson, y Michelle Dockery.

Original puesta en escena del clásico de Tolstói que nos lleva a un teatro muy especial donde los decorados van y vienen, y los personajes del drama circulan entre bambalinas y por la tramoya, donde tan pronto observamos escenas cotidianas coreografiadas como un ballet o un musical, como planos de naturaleza encuadrados con un fondo dibujado, vestuarios muy cuidados, y una iluminación y colorido impactantes.

Toda la película es una llamada a los sentidos, principalmente la vista por como está rodada, todo parece en perpetuo movimiento, escenarios que suben y bajan, personajes y mobiliario que se mueven a la vez, telones que suben y bajan, trenes que vienen y van, pero también el tacto en esos bailes que las parejas llevan el ritmo casi sin tocarse, esos actos íntimos en primerísimo plano, sensuales y eróticos, el oído con esos ritmos que marcan los sellos al marcarse, o el abanico al agitarse, junto con una banda sonora muy efectiva, incluso con el olfato y el gusto con sus comidas.

Un reparto muy competente encabezado por Keira Knightley que se siente muy cómoda con este tipo de papeles, y con el director, que la tiene como musa, muchas caras conocidas de la televisión británica comenzando por Michelle Dockery (Downton Abbey) pasando por Ruth Wilson (Luther) y acabando por Matthew Macfadyen (Little Dorrit), sin embargo hay un borrón y es la actuación de Aaron Johnson como Vronsky, que no consigue ninguna química con la protagonista, y le hace un flaco favor a la película.

La propuesta de Joe Wright convence, aunque ese aspecto irreal que le impone por momentos le resta realismo, y en otros nos brinda escenas sublimes, una entrenida, diferente y dinámica visión de la obra literaria que imagino que no dejará indiferente a nadie, sea para bien o para mal.

- PUNTUACIÓN: 6,8.